miércoles, 29 de junio de 2016

Lo Morfina no quita lo Montejo I...


...De no verla llegar ya desconfío, 
y más me tarda cuanto más la ansío
y más la ansío cuanto más me tarda"
Julián del Casal 

Hace aproximadamente dieciséis años comencé a utilizar el sobrenombre de Morfina Montejo, casi  la mitad de mis años, la mitad de mi vida...no sé si siempre me pongo un poco sentimental cada que cumplo años, mas es bueno recordar de dónde se viene: puedo levantar la mirada, y ver las estrellas, puedo hacerlo hacia abajo y reconocer las raíces.  
¿De dónde vienes, hacía dónde vas? 
Recuerdo una frase que escuché en la infancia en una misa: "Con el sudor de tu rostro comerás el pan hasta que vuelvas a la tierra, porque de ella fuiste tomado; pues polvo eres, y al polvo volverás." Me impactó mucho. No me quedaba claro a qué se referían con "Tierra", pues yo me imaginaba el planeta y no la tierra como camposanto de parábola ¿y el polvo? sin duda alguna era polvo estelar. No podía ser de otra manera.  
Hoy día sabemos que sí, en verdad provenimos de las estrellas, hay varias teorías, como aquella que indica que la vida llegó a la Tierra viajando en un meteorito... o para la banda que prefiere lo New Age, pues está la versión de que nuestros hermanos mayores nos colocaron aquí. Los conspiranóicos dirán que los Anunaki; también están los clásicos, que nunca pasan de moda, cuya interpretación indica que el todo poderoso modeló con barro a un hombre y a una mujer para que luego  su descendencia poblara la Tierra. 
Al fin y al cabo, todo apunta a la Exogénesis y, por razones muy concretas que no son menester a tratar el día de hoy, puedo decir que mirar al cielo me ha brindado paz desde siempre, o al menos desde que tengo memoria y también puedo asegurar que, gracias a ello, sigo hoy día entre los mortales, disfrutando de la vida. 
En especial, desde siempre he preferido el cielo nocturno, limpio y despejado, mirar las estrellas e imaginar que en cada una de ellas hay una posibilidad: 

"Si sólo estamos nosotros, cuanto espacio desaprovechado"

Palabras interesantes que emplea el personaje interpretado por Jodie Foster en la película "Contact" (1997). En fin, me he desviado un poco del tema, cosa que me pasa seguido, mucho más de lo que yo quisiera. Al final, todo tiene un por qué.  


LO MORFINA

Entonces, decía que, adopté el rol de Morfina Montejo en la juventud, la primera vez que me pidieron firmar con un seudónimo, me vinieron a la mente esas dos palabras. No de la nada. 

Julián del Casal (1863-1893)
Hacía no mucho, había escuchado en un programa de radio las referencias de algunos personajes que habían muerto de una manera muy peculiar: ataques de risa. Entre ellos, llamó mi atención Calcas, augur de la mitología griega, quien predijo su propia muerte y al creer que había vencido a ésta al llegar el día señalado, sufrió un ataque de risa, tan implacable que terminó con su vida. Así de irónico.

Otro personaje fue Julián del Casal, poeta cubano del movimiento modernista. Honestamente, no soy su fiel seguidora; no conozco su obra en totalidad, ni mucho de su vida, mas se decía que trataba de emular a Baudelaire, no sólo en la "morbosidad" de sus letras, sino  en el uso de estupefacientes...que a ciencia cierta, a nadie consta si en verdad era consumidor, o sólo era un escaparate dentro de su imaginario  para evadir la realidad que vivía en Cuba y su deseo ardiente de visitar París, propósito que nunca se materializó, quizá porque temía sufrir un desencanto al llegar y mirar que la ciudad no respondía al llamado de sus sueños; además, Julián murió poco antes de cumplir los treinta años, a causa de una hemorragia provocada por un ataque de risa. Cuenta la leyenda que le invitaron a cenar y alguien en la mesa contó un chiste...espero que haya sido jodidamente bueno. Seguramente le faltaban muchas cosas por hacer, o quizás no. Así es la ironía de la impaciencia por formar parte del club de "los malditos". Dicen que su vida fue dura desde la infancia y que creció mal, como sea, no soy un juez. Para mí, lo realmente trascendente de este programa radiofónico fueron los poemas recitados: "Las horas", cuyo fragmento final es con el que se inicia la entrada de éste post y "La canción de la Morfina", en donde la sustancia nos habla en primera persona con una voz tanto frívola como simpática.  
La morfina es una sustancia sintética derivada del opio, descubierta a principios del siglo XIX por el químico alemán Friedrich Sertürner y nombrada así por él mismo, aludiendo a Morfeo. El locutor del programa mencionó la posibilidad de que Julián hubiese probado alguna vez la morfina, sin necesidad de ser adicto. Todo parecía tan... mágico. Alcancé a rescatar algunos versos aquella ocasión, por fortuna, hoy día se pueden hallar en la red  (como casi cualquier cosa). 

                                  

La canción de la morfina

Amantes de la quimera,
Yo calmaré vuestro mal:

Soy la dicha artificial,

Que es la dicha verdadera.



Isis que rasga su velo
Polvoreado de diamantes
Ante los ojos amantes
Donde fulgura el anhelo;

Encantadora sirena
Que atrae, con su canción,
Hacia la oculta región
En que fallece la pena;

Bálsamo que cicatriza
Los labios de abierta llaga;
Astro que nunca se apaga
Bajo su helada ceniza;

Roja columna de fuego
Que guía al mortal perdido,
Hasta el país prometido
Del que no retorna luego.

Guardo, para fascinar
Al que siento en derredor,
Deleites como el amor,
Secretos como la mar.

Tengo las áureas escalas
De las celestes regiones;
Doy al cuerpo sensaciones;
Presto al espíritu alas.

Percibe el cuerpo dormido
Por mi mágico sopor,
Sonidos en el color,
Colores en el sonido.

Puedo hacer en un instante
Con mi poder sobrehumano,
De cada gota un océano,
De cada guija un diamante.

Ante la mirada fría
Del que codicia un tesoro,
Vierte cascadas de oro,
En golfos de pedrería.

Ante los bardos sensuales
De loca imaginación,
Abro la regia mansión,
De los goces orientales,

Donde odaliscas hermosas
De róseos cuerpos livianos,
Cíñenle, con blancas manos,
Frescas coronas de rosas,

Y alzan un himno sonoro
Entre el humo perfumado
Que exhala el ámbar quemado
En pebeteros de oro.

. . . . . . . . . . . . . . . . . . . .



Quien me ha probado una vez
Nunca me abandonará.

¿Qué otra embriaguez hallará

Superior a mi embriaguez?



Tanto mi poder abarca,
Que conmigo han olvidado,
Su miseria el desdichado,
Y su opulencia el monarca.

Yo venzo a la realidad,
Ilumino el negro arcano
Y hago del dolor humano
Dulce voluptuosidad.

Yo soy el único bien
Que nunca engendró el hastío.
¡Nada iguala el poder mío!
¡Dentro de mí hay un Edén!

Y ofrezco al mortal deseo
Del ser que hirió ruda suerte,
Con la calma de la Muerte,
La dulzura del Leteo.


¿Cómo resistirse a tal encanto? En ese momento, yo misma quería ser la Morfina...pero ahora me siento afortunada de que existan las segundas partes.
Continuará...


lunes, 2 de mayo de 2016

"ORACIÓN KÁRMICA"

Siempre es bueno escombrar y tratar de poner orden, sacar la basura, lo viejo, quizá algunos recuerdos. Aunque ¿qué podría decirles yo? que soy una persona a la que a veces le cuesta mucho dejar ir el pasado; quien me conoce un poco sabe mi vieja y loca manía de coleccionar viña y cachibaches...de toda la vida. Claro, existen jerarquías, las necesidades van cambiando y no se puede mantener todo. Llámenme romántica, pero cuando estoy a solas me gusta sostener los objetos y "sentirlos". No piensen mal, hablo de las sensaciones y al tipo de nostalgia a la que evocan, pues no todas las nostalgias son gratas para la salud, algunas de ellas son sólo el miedo disfrazado. Un ladrón que quita espacio, tiempo y oxigeno, elementos que no puedo darme el lujo de perder hoy día. Por ello la singular atención a descubrir lo que me hacen sentir...y determinar si son importantes en mi vida. 
No es tan sencillo como parece, no para una persona tan demente (de closet) e intensa como su servilleta. En fin, en realidad lo que deseo compartir es un breve texto que hallé en mi vieja libreta de idiomas...por alguna extraña razón en la primera parte de la libreta se encuentra un breve tratado sobre mí. Memorias abreviadas y sentimientos encontrados. Al final, había escrito lo siguiente:

ORACIÓN KÁRMICA 

Me perdono a mí misma, te perdono a ti y pido una curación completa de los dos, de todos nosotros,
en todos los niveles de nuestro ser, en todos nuestros cinco sistemas corpóreos 
para que ya nunca más sea afectada, distraída, retrasada por nuestras acciones o por nuestra interacción, ni tú por las mías.
Te mantengo en luz
Te mantengo en el amor divino
Te mantengo en el poder divino
Te mantengo en la sabiduría divina.
Llamo a las tres veces doblada llama del Amor, Poder y Sabiduría...y te libero dentro de ella.

Cualesquiera que sean las lecciones que los dos acordamos aprender el uno del otro durante esta vida, pido que las aprenda con alegría y rezo para que tú también las aprendas con alegría.
Ofrezco, desde el fondo de mi corazón, la Luz Blanca Pura, para que te sane a ti y a mí.
Llamo a la Luz Blanca Pura de la presencia del YO SOY EL QUE YO SOY, para que descienda sobre mi corazón y tu corazón, y te perdono por todos los momentos en los que me he sentido traicionada por ti.
Te perdono por todos los momentos en los que he estado herida por ti.
Te perdono por todos los momentos en los que mis emociones han sacado lo peor de mí como resultado de lo que has hecho.
Te perdono por todos los momentos en los que he tenido pensamientos de baja vibración y los he dirigido hacia ti.

Me perdono a mí misma por todos los momentos y bajos pensamientos que te he enviado;
por todas las bajas emociones que he dirigido hacia ti;
por todo el dolor físico que he deseado que sufras. 

Confieso que nunca, hasta donde sé, he deseado el dolor o el mal para nadie...pero quizá a veces lo propicio, directa o indirectamente. Yo no lo sé de cierto, mas dicen que la mayoría de los accidentes se producen por la falta de atención en el aquí y el ahora. Las consecuencias suelen ser costosas o dolorosas, pero te hacen cambiar o poner más atención y aún así nadie te ofrece la garantía de que estarás a salvo del todo, pues nos encontramos expuestos a las distintas conexiones que existen alrededor, con las personas que tocan nuestras vidas.
No sé quién escribió esa "oración kármica"; detesto encontrar textos y no recordar de quién son. Poseo memoria fotográfica para algunas cosas y memoria de pez para otras tantas, con un grado de importancia mayor. He ahí un buen consejo: hacer anotaciones...una nunca sabe cuándo habrá de hacer un uso real de ellas, aunque existe la loca teoría de que pasado, presente y futuro están ocurriendo simultáneamente. Debe de ser. 


Una cosa es cierta, al releer mis memorias se me removieron pensamientos y sentimientos;  logré comprender algunos de los por qué y para qué de lo acontecido en los últimos años, por ello, hoy día puedo decir que ya no creo en el Karma. No quiero decir que viejas creencias y paradigmas han sido una perdida de tiempo, tampoco que permaneceré exenta de caer de nuevo (puede que no de la misma manera) o mantenerme al margen de la línea punteada. Sería demasiado arrogante  y pretencioso.
Libre albedrío y fuerza de voluntad es lo único realmente que nos pertenece, lo demás sólo se encuentra en la imaginación. 
Una ilusión que a veces cuesta cara.

Creo que a veces es bueno ser como una cebolla a la que hay que ir pelando para quitar las capas cuarteadas, claro que, con el tiempo se secarán las nuevas capas y habrá que quitarlas también, en su momento. Eso permite que la vida se renueve y el mundo siga girando, recordando que no somos ni mejores ni peores y que por algo nos encontramos en el camino.

Pierre Auguste Renoir - "Cebollas" (1881)

martes, 29 de marzo de 2016

SUEÑOS DE LICANTROPIA III

A modo de conclusión, dos breves textos extraídos del ensayo "Licantropía; Historias de hombres lobo en Occidente", de Jorge Fondebrider, un precioso libro que me encontró el año pasado, sin querer y por error, en la biblioteca de México (una vez más en la Ciudadela). Fondebrider muestra una recopilación de mitos y leyendas, en donde se puede apreciar cómo fue surgiendo y creciendo el personaje del hombre lobo a través del tiempo. Muy recomendable.


EL HOMBRE LOBO: OTRA LEYENDA

Un matrimonio de Hessen vivía en la pobreza. No obstante, para sorpresa del marido, la esposa podía servir carne en todas las comidas. Durante mucho tiempo mantuvo en secreto de dónde conseguía la carne, pero finalmente le prometió a su esposo revelárselo bajo la condición de que no pronunciara el nombre de ella mientras la conseguía. Junto fueron al campo, donde pastaba un rebaño de ovejas. La mujer caminó hacia una de ellas y, a medida que se le acercaba, arrojó un anillo sobre sí misma, convirtiéndose instantáneamente en loba. Cayó sobre la oveja, la atrapó y huyó. El hombre se quedó allí como petrificado. Sin embargo, cuando vio al pastor y a sus perros corriendo tras la loba, olvidó su promesa y gritó "¡Margaret!".  Con el grito desapareció la loba y la mujer quedó desnuda en el campo.
Karl Lyncker (1854). "Deutsche Sagen und Sitten in Hessischen Gauen"




LA BRUJA QUE SE CONVERTÍA EN LOBA

Cierta vez una bruja iba cruzando un campo bajo la forma de loba para cautivar a las vacas de un granjero. Su marido salió a buscarla y, cuando vio a la loba, temió que que pudiese tratarse de su esposa, de modo que preguntó:
-Marie, Marie, ¿qué estás haciendo acá?
Eso asustó a la mujer, que volvió a su forma humana.
Pero cuando el hombre se acercó a ella, todavía tenía pelos rojos en el cuello y en los pechos, y sus ojos aún conservaban el resplandor que tienen los ojos de los lobos.

Karl Bartsch (1844) " Pastor Bassewitz in Brütz"





Claro, infinidad de historias que han corrido de boca en boca a través de los siglos, sirvieron para inspirar al cine hollywoodense y, a pesar de que existen cintas muy buenas (incluyendo las de humor negro que llegan a ser tan malas como divertidas en sí mismas), desgraciadamente, el tiempo las fue desvirtuando  con la taquilla palomera y las "series juveniles" que buscan llenar las expectativas de los y las adolescentes de hoy día...pero ese, es otro cuento. 
Como posdata, dejo el link de un episodio de Night Gallery, se titula "La granja fantasma"y, según el propio Rod Serling, narra la historia de aquella emoción que nació con el hombre, pero que no se puede mirar a simple vista. 

Muy propio para concluir con mi sueño. Buenas Lunas. 
(Por favor, da click en el link.)





jueves, 1 de octubre de 2015

La verdad está allí dentro...

Un día, me vas a pedir que te hable de la verdad, sobre el milagro de tu nacimiento. Que te explique lo que es inexplicable. Y si titubeo o fallo en ese día, debes saber que hay una respuesta, hij@ mí@. Una verdad sagrada y efímera, pero que tal vez nunca descubrirás sol@. 
Es posible que encuentres a tu pareja perfecta, a tu perfecto opuesto, que te protegerá y te pondrá en peligro a la vez, quien te hará mirar y sacar lo mejor y lo peor de ti. Es posible que te embarques con ese alguien en el mayor de los viajes, en una búsqueda de la verdad fugitiva e imponderable; si un día esa posibilidad llegara a ocurrirte, hij@ mí@, no falles ni titubees para atraparla. La verdad está allá afuera, y si algún día llegara a ocurrirte un milagro como el que yo tuve contigo, aprenderás que la verdad no se encuentra en la ciencia, ni en un plano inadvertido. 
Busca en tu propio corazón y en ese momento serás bendecid@ y abrumad@ por la más cierta de las verdades, en cuanto a lo que nos tiene unidos o nos mantiene dolorosamente, desesperadamente separados. 

viernes, 4 de septiembre de 2015

Dime, Saúl, cómo llegar…

Dicen que la vida pasa en momentos y hoy llegaron recuerdos gratos de mayo del 2011.  En Rock 101 me pidieron mi reseña del concierto de Saúl Hernández en el Lunario para publicarla en su sitio web. Han pasado varios años y al releer mis palabras, me parecen hoy día un tanto frívolas, pero hay algo en ellas que me sigue agradando: mi pequeño toque de gracia. Con los años ha disminuido, pero siempre es bueno echar un ojo atrás para mirar de dónde vienes y los bordes de las línea que has trazado. 

Quiénes han tenido el gusto o disgusto de conocerme un poco saben que, a pesar de no ser experta, suelo esconderme tras la palabra escrita, aunque en los últimos tiempos no hubo mucho qué decir; puede que esta reseña parezca insignificante para el mundo exterior, mas, al igual que Saúl, me divertí de lo lindo, tanto en el concierto como escribiendo,  convirtiéndose en  una  grata experiencia para mis memorias de veterana. Rescaté mi texto de un viejo enlace (http://r101ck_mx.apache3.cloudsector.net/archivo/11794-dime-saul-como-llegar/), pues con los años y la página de r101ck renovada, hay reseñas que se encuentran al borde de la extinción. 
Por ello decidí colocarla aquí, antes que desaparezca.    

Dime, Saúl, cómo llegar…

Por: Morfina Montejo
Fotos: Fernando Aceves


El Lunario del Auditorio Nacional fue el punto de encuentro para muchos de aquellos que gustan de la presencia musical de Saúl Alfonso Hernández Estrada, quien mostraría una faceta novedosa, tras el reciente lanzamiento de Remando, primer material sonoro realizado como solista. Tras el lleno total, el músico no hizo esperar a su ferviente público, saliendo al escenario pasaditas las 21:00 hrs.
Antes de ir largo y tendido, es necesario ponerle pausa al asunto y hacerle remembranza a un previo señalamiento, puesto que, la cita estaba pactada de antemano con ciertas características: El señor Hernández, además de promocionar su nuevo disco, ejecutaría una tanda de covers como tributo a sus grandes influencias musicales, entre ellos se mencionaban desde Jaime López hasta Gustavo Cerati. Dicho lo anterior, una iba preparada mentalmente para presenciar algo distinto, creyendo fielmente que el buen Saúl dejaría en casa, o en cualquier otro sitio, el atuendo de Caifán Mayor y su piel de mítico “Jaguar”, para simplemente ser él, sin su circunstancia. En el transcurso de la noche se esclarecerían muchos misterios, algunos de ellos, no tan ocultos como los dioses.
Bien, querido lector, pongámosle play al asunto. El primer mal augurio de la noche surgió al observar que en la entrada estaban obsequiando hojas, las cuales, llevaban plasmada la letra de “Hallelujah”, original del poeta, músico y novelista canadiense Leonard Cohen (quien por cierto, recibió merecidamente el Premio Príncipe de Asturias de las letras 2011); mi temor fue reconocer que se pretendería, en algún momento de la presentación, dar un uso práctico a dichas hojas.
Habría querido llegar con 30 minutos de anticipación para elegir una mejor ubicación, sin embargo (y no me enorgullece decirlo), la puntualidad no ha sido mi fiel compañera los últimos días, pero sí de Saúl, al menos en esa noche. Al ingresar, el lugar se encontraba lleno y comenzaba a sonar “Molecular”, que no sólo es la canción con la que comienza su álbum y el sencillo que suena en la radio, sino también, con la que decide arrancar el concierto, seguida por “Bruja Caníbal”; en efecto, el primer zarpazo del jaguar fue muy tempranero, con él, venía hacia mi el segundo mal augurio de la noche: habrá más de ellos. No andaba tan errada.

¿Cómo decirlo? Resultó muy emotivo para el público corear las canciones de Jaguares, hasta cierto punto. Creo que fue una buena estrategia para aminorar la carga de escuchar todo (si, completito) su nuevo material; hay quienes dicen que de vez en cuando hay que recordar de dónde vienes, aunque se suponía que en este concierto no tendría que ser menester. La situación es que los temas de “Fin” (la única que disfruté), “Detrás de los cerros”, “Así como tú”, “Un mal sueño”, “Kalimán”, “Entre tus jardines” y “Las ratas no tienen alas”, fueron versiones un tanto extrañas al ser covereadas por él mismo. Bueno, pudo haber sido peor si hubiese tocado rolas de Caifanes. Afortunadamente, no fue así.



Aproximadamente habían pasado ya 45 minutos, intercalándose lo nuevo con lo viejo, cuando llegó un importante aviso: -la hora de rendir homenaje-. Saúl hizo alusión a sus años mozos y a las personas que le han inspirado para componer sus letras a lo largo de su trayectoria. El primero de la lista, Leonard Cohen; fue entonces cuando comprobé mi antiguo temor -no hay plazo que no se cumpla-, pues el señor Hernández preguntó por “las hojas que dieron en la entrada” e invitando a sus seguidores a cantar con él, se dispuso a interpretar “Hallelujah”. No lo sé de cierto, pero creo que a él también le dieron “hoja”, pues parecía que estaba leyendo la letra, incluso al final, sonriendo y bromeando, pide disculpas por su mala pronunciación; fue gracioso, no me sentía así desde que era niña y asistía involuntariamente a las posadas y a una que otra misa dominguera.
Siguiendo en el menester de los homenajes, el buen Saúl interpreta “La Maza” de Silvio Rodríguez, “Lucha de Gigantes” de Antonio Vega y, dentro del segundo set, “María de mis Alquimias” de Memo Briseño, que a mi parecer, fue de las cuatro, la versión más afortunada, pero en sí, todas dejaron mucho qué desear; salvo su mejor opinión, me atrevería a decir que no las tenía preparadas al 100%. El señor Hernández tiene la vieja costumbre de cambiar la letra de las canciones, sé que nadie es perfecto, pero si la intención es rendir un homenaje a alguien que admiras y respetas, se podría poner más empeño. Habría que dar gracias a los Dioses ocultos, por mera salud mental, de que ante las previas especulaciones, no se haya aventado rolas de Gustavo Cerati.
Posteriormente, continuaba la interacción del pasado con el presente, o dicho de otro modo, el Jaguar seguía Remando, despidiéndose una primera vez y saliendo al escenario una segunda, tras una marejada de aplausos y vociferaciones que aclamaban su presencia. Así, el Jaguar Mayor, se despedía de su raza con “Las Ratas no tienen Alas” y “Voy a beberme el Mar”, canción que también cierra su álbum y se presume, fue dedicada a Rita Guerrero. Al final, la melancolía de los acordes menores y disminuidos anunciaban un buen cierre, ante una reverencia del compositor y los tres jóvenes músicos que le acompañaban en el bajo, guitarra y batería, ante un público que no se cansaba de brindar muestras de afecto y admiración; el escenario quedó vacío tras el clásico –“¡Gracias raza, que Dios te bendiga!”- y toda esperanza de que el cantante volviera a salir, se vio extinta al encenderse las luces y la música de fondo del recinto. Pero el ritual no terminaba aún, pues faltaba realizar la adquisición de muestras fehacientes que comprobaran el haber estado ahí, que iban desde productos originales como CDs y T-shirts, hasta el típico souvenir apócrifo que se vende por fuera.
A groso modo, los misterios de la noche de disiparon, al igual que las expectativas de quien escribe, aún así, surgieron aspectos interesantes que mi mente masticaba de regreso a casa y que, si su tiempo lo permite, me gustaría comentar, entre ellos la respuesta de sus fieles seguidores, quienes aplaudían cada palabra y cada movimiento de su ídolo.
Cabe señalar que, Remando, salió a la venta el 29 de abril. A poco menos del mes, la mayor parte del público coreaba los temas, incluso había quienes cantaban apasionadamente, como si las conocieran de hace muchos años. Podría resultar aventurado asegurarlo, pero creo que hasta el propio Saúl Hernández se sorprendió.

No soy partidaria de los límites impuestos, pero sí de que los límites y las limitaciones para disfrutar de algo, los pone uno mismo; como espectador, puedo decir que no me convencí del todo, pero debo reconocer que el señor Hernández se divirtió de lo lindo en el escenario, le pone pasión a pesar de que existe cierto impedimento físico, que ha sido ya asimilado, sí, lo digo por su voz, que tras varias operaciones en las cuerdas vocales (mi buen amigo Antonio dice que son 40), no ha podido volver a tener la potencia y el color con el que se dio a conocer.

Incluso, aplaudo su buena intención de tratar de hacer un homenaje a sus compositores favoritos, aunque los resultados no hayan sido favorables para mí; habrá un 95% de las personas que asistieron que podrían opinar lo contrario. Creo que la entrega total que puede surgir hacia un ícono, sin cuestionar nada y por ende, perdonar todo de antemano, creyendo así que es la neta del planeta, puede llegar a ser contraproducente, tanto para el artista como para el público, pues impide crecer a ambos.
Puede que usted me vea un tanto apática con el buen Saúl, pero de hecho hay mucho que admiro de él. Quizá no de hoy, incluso no compraría su disco (a pesar de ser producido por el multipremiado Don Was), sin embargo, en algún momento de mi vida he disfrutado de su talento, estoy segura de que lo seguiré haciendo y habrá alguien más que lo haga; no es que viva del pasado, sino que hay situaciones que traspasan tiempo y espacio.
Existen muchos mitos alrededor de su figura, con bastante carga simbólica, un peso muy grande al parecer; diversas bandas por las que transitó y colaboró como Frac y Las Insólitas Imágenes de Aurora, por ejemplo, aún tienen muchas historias que contar. Lo que más añoro son esas letras incesantes de metáforas, de donde se podían exprimir los colores que adornaban la absurda realidad, todo eso, se encuentra en algún otro lugar, por ahora. Hoy no sabría dónde encontrarle, dime, Saúl, cómo llegar.



domingo, 7 de junio de 2015

MILAGRO



PHILLIP PADGETT





"A menudo vengo aquí para mirar esta pintura. Se llama "Mi Divino Corazón", después del milagro de Santa Margarita María . ¿Conoces la historia ... La revelación del Sagrado Corazón? Cristo vino a Margarita María con su corazón tan inflamado de amor que ya no era capaz de contener las llamas ardientes de la caridad. Margarita María ... tan llena de amor divino en sí misma, pidió al Señor que tomara su corazón ... y así lo hizo, colocándolo junto al suyo, hasta que se quemó con el fuego de su pasión. Luego se lo restituyó y selló la herida con el toque de su mano bendita..."



"Soy un escritor. Eso es lo que hago, imagino cómo se comportan las personas. Tengo que admitir que usted ha llamado mi atención. Así que ...observo personas.  Vi que usted usa una cruz de oro alrededor de su cuello, así que creí tener una oportunidad con esta pintura, tratando de explicarle algo que,  muy probablemente, usted ya conocía."

 



- ¿Qué estás haciendo aquí?

- Pareces sorprendido de verme.

-Sí. Completamente.

- ¿Por qué? Soy tu creación.

-¿Qué quieres?

-Estoy aquí para ayudarte a terminar.

-Aún no puedo averiguar el motivo.

-Me imaginaste tan perfectamente en todos los sentidos. Tan perfectamente que me diste vida. ¿Por qué me elegiste a mí?

-Yo necesitaba un crimen perfecto. Y ella es médico. Ella estaría horrorizada por lo que haces.

- ¡Yo mismo estoy horrorizado! ¡Sólo quiero saber por qué lo hago!

-Así  podrías acercarte a ella.

-Eso no es una razón. Es una excusa. Ahora, ¿qué es esto?

-Un gran error. Me juzgué mal, es decir, juzgué mal su interés por mí.

-Ahora estamos en lo cierto.

-Ella sólo está tratando de llamar la atención de su compañero, pero no lo sabe.

-El viejo inconsciente trabajando

-Yo sólo quería amarla.

-No me extraña que no puedas terminar este libro, Padgett. ¿Por qué quiero su corazón?

-Dímelo tú. ¿Por qué lo haces?

-Soy tu personaje. Dímelo tú. Mi razón es tu razón.

-Quiero sentir el amor.

-No. No. Lo tenías hasta allí. Tú eres un instrumento de la verdad. Y cuando finalmente te acercas, cuando estás tan cerca, no quieres verlo.

-Pero, ¿qué es la verdad?

-El hombre imagina que él, también, puede abrir su corazón y exponer las llamas de su pasión, las llamas de la caridad, como el creador mismo, pero esto no está en su poder.

-Pero tengo amor en mi corazón.

-Sí, claro, como un ladrón tiene riquezas, dinero el usurero...lo tienes... pero sólo el poder del hombre, el único poder verdadero del hombre, es destruirlo.

-Entonces ¿cuál es el final de mi historia?

-Sólo puede haber un verdadero final si ha de ser perfecto.

-¿Ella muere?

-¿Ves? Casi se escribe sola.







Una historia sólo puede tener un final verdadero. A pesar de que el desconocido se sintió obligado a cometer sus últimas palabras en el papel, lo hizo a sabiendas de que nunca habrían de ser leídas. Para ver la suma de su trabajo tuvo que mirar dentro de su propio vacío el corazón de un destructor y no el de un creador. Y, sin embargo, reflejado de nuevo sobre él, por fin pudo ver su propio final. Y en este último acto de  destrucción, tuvo la oportunidad de dar lo que no podía recibir.







sábado, 25 de abril de 2015

A lot of worlds to see ...

Sólo puedo esperar que me perdonen…no pido que me entiendan, pues hay cosas que simplemente no se pueden explicar. No  duden nunca que los amo y agradezco la oportunidad de haberlos conocido; hubo grandes momentos y muchas alegrías. Gracias.
Quedémonos con eso.
Hay un gran vacío que no puede ser llenado en este plano…siento una gran soledad, como la gran mayoría de las personas, mas mi soledad es una nostalgia muy profunda y añeja que llevo a cuestas desde pequeña y desde la raíz; es el deseo acrecentado de regresar a casa, con esa parte de mí que me espera en otro lugar. Sólo quiero y ansío un momento de paz. Aquí ya no es mi sitio, lo sé ya mismo, lo supe desde hace mucho y desde siempre me fui extrañando a mí misma, cada día un poco más.
Todo está bien ahora. Soy todo aquello que he estado buscando.

Gracias de nuevo. Los amo.